Después de las historias de hoy con los mensajes que recibí por parte de varias madres que se sienten identificadas quiero simplemente recordar esto: nosotras somos madres imperfectas, criando hijos imperfectos y eso es perfectamente normal y esperado.

La maternidad es una gran responsabilidad es verdad, pero no perdamos el foco, disfrutemos a nuestros hijos como queremos, si te gusta cargarlos, cárgalos mucho, si te gusta consolarlos hazlo cada vez que te necesiten, si les das la teta, adelante son tuyas y es tu cuerpo, si le das biberón celébralo también, si trabajas fuera de casa, enhorabuena y si trabajas desde casa enhorabuena también.

Criar es una de las tareas más importantes que haremos jamás y eso significa noches sin dormir, gritos constantes por casa, bebé que quiere teta a toda hora, comer a deshoras, hija que llora sin parar y necesita consuelo, fiebres… y eso agota y agota mucho lo sé, lo he vivido y aún lo vivo. ¿Les parece que además de todo eso tengamos que lidiar con las críticas por la forma en la que lo estamos haciendo?🤦🏽‍♀️.

Esa sensación de tristeza, soledad, de sentirnos a veces frustradas por creer que no lo estamos haciendo bien es terrible y es muy duro. Porque abrazar, consolar, dar amor, alimentar con nuestro cuerpo y emociones es un trabajo tan valioso que no lo valoramos como deberíamos. Criar es la tarea más ardua, profunda e importante que podemos llegar a hacer. Tanto es así que todos hemos sido criados por alguien que se atrevió a vivir lo duro y bello de la crianza. Así que tú como mamá ya eres una campeona por el solo hecho de atreverte a CRIAR.

Una mamá psicóloga. Milena González

Share This